Día de la Enfermera Cubana. Se celebra por vez primera el 3 de junio de 1924, en conmemoración al natalicio de Victoria Brú Sánchez, enfermera cubana que falleció víctima de la epidemia de influenza que azotó el país en 1918.
El 4 de abril de 1924 Hortensia Pérez, Sub-Jefa del Negociado de Enfermeras, propuso a la Junta del Consejo, presidida por Pelegrina Sardá y Sardá, la celebración del Día de la Enfermera en Cuba. La propuesta de esta celebración fue aprobada por el doctor Enrique Porto, entonces Secretario de Sanidad y Beneficencia, y sometido a la consideración del presidente de la república.
Victoria Brú Sánchez nació el 3 de junio de 1876 en Managua, provincia de La Habana. En 1903 ingresa en la Escuela de Enfermeras del entonces Hospital Número Uno, hoy General Calixto García, y se gradúa en 1906.
Obtiene plaza en el Hospital de Remedios y, al año siguiente, regresa a su Hospital Número Uno. En octubre de 1818, una epidemia de influenza comienza a azotar la ciudad de Cienfuegos. En esos momentos Victoria estaba de licencia por enfermedad; pero ante la situación del creciente número de enfermos, decidió incorporarse al trabajo y, junto a sus alumnas, comenzó a visitar las familias necesitadas. En pleno ejercicio de esta humanitaria labor fallece a causa de la enfermedad epidémica, el 7 de diciembre de 1918, a los 42 años de edad.